Como cada año, la Organización Mundial de la Alergia (World Allergy Organization – WAO) celebró el 8 de julio el Día Mundial de la Alergia, para concientizar sobre las enfermedades alérgicas y su impacto en la salud global. La alergia es una respuesta exagerada del sistema inmunológico a sustancias que normalmente son inofensivas, llamadas alérgenos, en personas susceptibles, donde factores genéticos, ambientales y de estilo de vida desempeñan un papel crucial.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), las enfermedades alérgicas están entre las seis patologías más frecuentes. La alergia es una reacción o respuesta alterada del organismo ante una sustancia denominada alérgeno o antígeno, por sí misma inofensiva pero que afecta a personas genéticamente susceptibles o predispuestas. El sistema inmunológico de estas personas alérgicas genera mecanismos inflamatorios como respuesta, los cuales están determinados por un anticuerpo: la inmunoglobulina E o IgE. En las últimas décadas, estas patologías se han convertido en uno de los principales problemas sanitarios de la mayoría de los países. Los factores ambientales, el estilo de vida y la alimentación, entre otros, están implicados en este preocupante incremento de las alergias.
Según datos predictivos de la Organización Mundial de la Alergia, se estima que para el año 2050 la mitad de la población estará afectada por las alergias, y en la actualidad más de 400 millones de personas en todo el mundo padecen algún tipo de enfermedad alérgica.
Tipos de alergia
El asma y la rinitis alérgica son las dos enfermedades más prevalentes, ya que según manifestó la Organización Mundial de la Alergia, la cifra de pacientes con asma en todo el mundo supera los 300 millones, de los cuales el 80% también presenta síntomas de rinitis. Ambas constituyen un importante problema de salud, afectan notoriamente la calidad de vida y ocasionan altos costos al sistema sanitario.
La alergia alimentaria, que supone el 4% del total de las consultas de alergia, y las reacciones adversas por medicamentos, que se han incrementado notoriamente en los últimos años, pueden manifestarse en cualquier parte del organismo: en la piel, el aparato digestivo y el aparato respiratorio y, en algunas ocasiones, pueden provocar una reacción generalizada de colapso, conocida como shock anafiláctico, que es una urgencia médica y puede poner en peligro la vida del paciente si no se trata de forma rápida y adecuada.
En el caso de los trastornos alérgicos que afectan la piel, que son la dermatitis atópica, la urticaria, el angioedema hereditario y la dermatitis por contacto, producen un importante deterioro en la salud, la calidad de vida y el desarrollo psicosocial.
Por último, debemos mencionar las enfermedades alérgicas profesionales, como son el asma, la rinitis y las dermatitis por contacto (que fueron descriptas más arriba), que tienen origen y causa en el lugar de trabajo, siendo un capítulo amplio dentro de la medicina laboral, que tienen importantes implicancias en la salud, lo profesional y lo legal.
Alergia en la infancia
La Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) señala que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente el 25% de la población se ve afectada con alergias, siendo más frecuente durante la infancia (suelen comenzar durante esa etapa de la vida de las personas y manifestarse de forma crónica).
La intervención temprana por parte del especialista en Alergia e Inmunología Infantil es clave para modificar positivamente el curso de la enfermedad, proporcionando a las niñas, los niños y adolescentes afectados una mejor calidad de vida a largo plazo.
¿Es una alergia o un resfrío?
Según profesionales del Hospital Garrahan, muchas veces los síntomas de las alergias y del resfrío suelen confundirse, pero existen una serie de diferencias que ayudan a entender mejor la salud de los pequeños:
• Revisión ocular
El lagrimeo es más característico de la alergia, y en el caso de un resfrío el niño o la niña presentará principalmente congestión ocular.
• Dolor muscular
Las alergias no producen dolor muscular; sin embargo, los resfríos suelen traer dolores corporales.
• Mucosidad
La secreción nasal en un resfrío suele ser fluida al inicio, y posteriormente se vuelve más espesa, mientras que en las alergias la secreción siempre es acuosa.
• Fiebre
La alergia nunca produce fiebre, la cual está casi siempre asociada a una infección.
Fuentes:
– Sociedad Argentina de Pediatría (SAP)
– Organización Mundial de la Alergia (WAO)
– Hospital Garrahan