No es necesario agregar más sal a la comida

Considerando que la Hipertensión Arterial es uno de los principales factores de riesgo de enfermedad cardiovascular, coronaria y renal, entre otras, el área de alimentación del Hospital Garrahan elaboró un taller para prevenir la Hipertensión Arterial en los niños y sus familiares.

Según datos sobre el consumo, en  la Argentina se consume más del doble de sal de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud. ​La sal de mesa se compone de sodio y cloruro, dos químicos que son esenciales para la salud, pero sólo en cantidades muy pequeñas. El sodio y el cloruro se encuentran de manera natural en muchos alimentos y no es necesario agregarlos a los alimentos preparados.

“En  la Argentina se consume más del doble de sal de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud”.

¿Qué tenemos que hacer para prevenir la HTA?

-Mantener un peso saludable.

-Realizar ejercicio físico de moderada intensidad durante 30 minutos, todos los días, o 1 hora, 3 veces por semana.

-Modificar los hábitos alimentarios: consumir más alimentos naturales y menos alimentos industrializados.

-Agregar menos sal. El beneficio de reducir el consumo de sal es para todos, incluidos los niños.

 ¿Dónde se encuentra la sal?

Se encuentra presente naturalmente en casi todos los alimentos y esta cantidad es suficiente para cubrir nuestras necesidades nutricionales.

Recomendaciones para disminuir el consumo de sal:

-Cocinar sin sal. Si fuera necesario agregarle un poco al finalizar la preparación.

-Evitar llevar el salero a la mesa.

-Probar los alimentos antes de agregar sal al plato.

-Reemplazar la sal por otros condimentos que no la contengan. Utilizar: jugo de limón, vinagre, cebolla, ajo, hierbas aromáticas y especias.

-Evitar alimentos con alto contenido de sal como: caldos en cubos y sopas instantáneas en polvo, salsas envasadas, fiambres embutidos, hamburguesas y otras carnes saladas, palitos, papas fritas y otros productos de copetín.

Nosotros agregamos sal a la comida por costumbre o porque hemos aprendido a apreciar el sabor salado. Se puede agregar cantidades moderadas de sal a la comida, pero no en cantidades excesivas ya que las preferencias de sabor de un niño  se forman a una edad temprana; y grandes cantidades de sodio pueden ocasionar que tengan una presión arterial alta más adelante en la vida. Así que es importante enseñarles a los niños a evitar la sal innecesaria. Una manera es no poner el salero en la mesa del comedor.